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Mario Patón

Canción Oklahoma! (1943)

Aunt Eller:

They couldn’t pick a better time to start in life—


 

Ike Skidmore:

It ain’t too early and it ain’t too late.


 

Curly:

Startin’ as a farmer with a brand-new wife—


 

Laurey:

Soon be livin’ in a brand-new state!


 

All:

Brand-new state

Gonna treat you great!


 

Fred:

Gonna give you barley,

Carrots and pertaters—


 

Cord Elam:

Pasture fer the cattle—


 

Andrew Carnes:

Spinach and termayters!


 

Aunt Eller:

Flowers on the prairie where the

June bugs zoom—


 

Ike Skidmore:

Plen’y of air and plen’y of room—


 

Fred:

Plen’y of room to swing a rope—


 

Aunt Eller:

Plen’y of heart and plen’y of hope.


 

Curly:

Oklahoma,

Where the wind comes sweepin’ down the plain

And the wavin’ wheat

Can sure smell sweet

When the wind comes right behind the rain.


 

Oklahoma!

Every night my honey lamb and I

Sit alone and talk

And watch a hawk

Makin’ lazy circles in the sky.


 

We know we belong to the land,

And the land we belong to is grand.

And when we say:

Yee-ow! A-yip-i-o-ee-ay!

We’re only sayin’,

You’re doin’ fine, Oklahoma!

Oklahoma, O.K.!


 

All:

Oklahoma,

Where the wind comes sweepin’ down the plain

And the wavin’ wheat

Can sure smell sweet

When the wind comes right behind the rain.


 

Oklahoma!

Every night my honey lamb and I

Sit alone and talk

And watch a hawk

Makin’ lazy circles in the sky.


 

We know we belong to the land,

And the land we belong to is grand.


 

Yip-ee-i, Yip-ee-i,

Yip-ee-i, Yip-ee-i,

Yip-ee-i, Yip-ee-i!


 

And when we say:

Yee-ow! A-yip-i-o-ee-ay!

We’re only sayin’,

You’re doin’ fine, Oklahoma!

Oklahoma, O.K.!


 

Oklahoma, Oklahoma

Oklahoma, Oklahoma

Oklahoma, Oklahoma...


 

We know we belong to the land,

And the land we belong to is grand.


 

And when we say:

Yee-ow! A-yip-i-o-ee-ay!

We’re only sayin’,

You’re doin’ fine, Oklahoma!

Oklahoma,

O-K-L-A-H-O-M-A...

Oklahoma!


 

Aunt Eller:

No pudieron elegir un mejor momento para empezar su vida—


 

Ike Skidmore:

No es demasiado pronto ni demasiado tarde.


 

Curly:

Empezando como granjero con una esposa flamante—


 

Laurey:

¡Pronto vivirán en un estado completamente nuevo!


 

Todos:

¡Estado completamente nuevo,

que te va a tratar de maravilla!


 

Fred:

Te va a dar cebada,

zanahorias y patatas—


 

Cord Elam:

Pasto para el ganado—


 

Andrew Carnes:

¡Espinacas y tomates!


 

Aunt Eller:

Flores en la pradera donde

los escarabajos de junio zumban—


 

Ike Skidmore:

Mucho aire y mucho espacio—


 

Fred:

Mucho espacio para lanzar el lazo—


 

Aunt Eller:

Mucho corazón y mucha esperanza.


 

Curly:

Oklahoma,

Donde el viento barre la llanura

Y el trigo ondeante

Sin duda huele dulce

Cuando el viento viene justo después de la lluvia.


 

¡Oklahoma!

Cada noche, mi amorcito y yo

Nos sentamos a solas a hablar

Y mirar un halcón

Haciendo círculos perezosos en el cielo.


 

Sabemos que pertenecemos a esta tierra,

Y esta tierra a la que pertenecemos es grandiosa.

Y cuando decimos:

¡Yee-ow! ¡A-yip-i-o-ee-ay!

Solo estamos diciendo:

¡Lo estás haciendo bien, Oklahoma!

¡Oklahoma, muy bien!


 

Todos:

Oklahoma,

Donde el viento barre la llanura

Y el trigo ondeante

Sin duda huele dulce

Cuando el viento viene justo después de la lluvia.


 

¡Oklahoma!

Cada noche, mi amorcito y yo

Nos sentamos a solas a hablar

Y mirar un halcón

Haciendo círculos perezosos en el cielo.


 

Sabemos que pertenecemos a esta tierra,

Y esta tierra a la que pertenecemos es grandiosa.


 

¡Yip-ee-i, Yip-ee-i,

Yip-ee-i, Yip-ee-i,

Yip-ee-i, Yip-ee-i!


 

Y cuando decimos:

¡Yee-ow! ¡A-yip-i-o-ee-ay!

Solo estamos diciendo:

¡Lo estás haciendo bien, Oklahoma!

¡Oklahoma, muy bien!


 

Oklahoma, Oklahoma

Oklahoma, Oklahoma

Oklahoma, Oklahoma...


 

Sabemos que pertenecemos a esta tierra,

Y esta tierra a la que pertenecemos es grandiosa.


 

Y cuando decimos:

¡Yee-ow! ¡A-yip-i-o-ee-ay!

Solo estamos diciendo:

¡Lo estás haciendo bien, Oklahoma!

¡O-K-L-A-H-O-M-A...

Oklahoma!

Análisis: 

La Nación India, el territorio dispuesto por los colonos estadounidenses para los indígenas norteamericanos, disminuyó progresivamente a lo largo del siglo XIX hasta acabar reducido a la actual Oklahoma. Aquí vivían indígenas procedentes de todo el país: cheroquis, seminolas, osages, creeks, cheyenes, arapahoes, comanches, kiowas y apaches, entre otros. Sin embargo, también este nuevo lugar de destino resultó vulnerable frente a las incursiones ilegales de los blancos. El Gobierno cedió ante las demandas de los colonos, quienes quedaron con la parte occidental del territorio. En palabras de la Oficina de del censo, fue “la colonización de un territorio más rápida de la historia de Estados Unidos”. El nuevo territorio disponible para los colonos recibió el nombre de Oklahoma, que significa “pueblo rojo” en choctaw. Los indígenas, por su parte, quedaron con la oriental, que acabó siendo absorbida por Oklahoma con el beneplácito del Gobierno. Fue el fin de la Nación India.

Tiempo después, el dramaturgo cheroqui Lynn Riggs quiso contar la historia de esta destrucción. Estando en París escribió la obra teatral Green Grow the Lilacs (Verdes crecen las lilas), estrenada en 1931, una “celebración melancólica del territorio indio en el umbral del cambio […] con un final batallador”:

Cuando aparece en escena un agente federal, los personajes se niegan a cooperar con él porque, explican, están “repletos de sangre india” y consideran Estados Unidos como un “país obsesionado por la piel”. Con ese incómodo enfrentamiento, cae el telón.

La obra de Riggs sirvió de base para la aún más conocida Oklahoma!, el musical de Richard Rodgers y Oscar Hammerstein, quien declaró no haber modificado los diálogos originales porque “no se podían mejorar”. Sin embargo, en el musical no se menciona ni una sola vez la palabra indio. Los personajes de Oklahoma!, todos blancos, cantan “Sabemos que pertenecemos a esta tierra, y esta tierra a la que pertenecemos es grandiosa”. “Es el estribillo jubiloso del colono blanco”.

BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA-RECOMENDADA: 

  • Dunbar-Ortiz, R. (2019). La historia indígena de Estados Unidos. Capitán Swing.

  • Fernández, C., & Dolores, M. (2003). Un mito de celuloide: el indio en el western americano. Área Abierta Universidad Complutense de Madrid.

  • Herrera, J. (2009). La construcción de redes identitarias y de solidaridad en pueblos indígenas norteamericanos. Desacatos, 31, 171-172.

  • Immerwahr, D. (2023). Cómo ocultar un imperio. Historia de las colonias de Estados Unidos. Capitán Swing.

  • Lema, R. (2007). La visión del indio en tres detalles de Western. Versión. Estudios de Comunicación y Política, (15), 157-177.

  • Marcó del Pont Lalli, R. (2000). Lo que nunca dijo el jefe Seattle. Gaceta Ecológica, 57, 61-72.

  • Sánchez Marín, I. (2023). Escuela, política educativa y supervivencia cultural: Nativos americanos de Estados Unidos, Revista de Antropología Iberoamericana, 18(1), 68-90.

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